La obligación de permanecer confinados en nuestras casas por el estado de alarma decretado por el Gobierno desde el 15 e marzo ha alterado todos lo hábitos cotidianos, entre ellos el consumo en el hogar. Y no solo por el carro de la compra, sino también por consumo energético de las casas. La OCU ha advertido de que se ha producido un incremento del 28% en la factura, lo que supone 10 euros más de media para cada familia.
La obligación de permanecer confinados en nuestras casas por el estado de alarma decretado por el Gobierno desde el 15 e marzo ha alterado todos lo hábitos cotidianos, entre ellos el consumo en el hogar. Y no solo por el carro de la compra, sino también por consumo energético de las casas. La OCU ha advertido de que se ha producido un incremento del 28% en la factura, lo que supone 10 euros más de media para cada familia.
A pesar de la reducción global del consumo energético, debido a la caída del consumo de la industria y los comercios, el encarecimiento del recibo en los hogares sí que ha subido durante este periodo de confinamiento. El mayor uso del horno, el microondas, la vitrocerámica, la televisión y otros aparatos electrónicos como las videoconsolas y ordenadores, que permanecen durante más tiempo encendidos, han modificado las pautas de consumo.
Para el comparador Acierto.com “ahora la demanda es mayor por la mañana”.
El portal ofrece unos consejos sencillos para ahorrar durante el confinamiento y también en términos generales. Según sus cálculos, las familias podrían ahorrar hasta 2.000 euros al año y, además, cuidando del medioambiente.
- Desde renovar los viejos electrodomésticos. “Contar con unos eficientes nos ahorraría alrededor de 400 euros”, hasta lavar la ropa a 40 grados en lugar de a 60.
- Ajustar la temperatura del frigorífico. Y Evitar las incursiones a la nevera: cada vez que la abrimos, el frigorífico necesita recuparar su temperatura, y estamos desperdiciando hasta un 7% de la energía acumulada.
- Instalar aireadores de grifos y duchas que reducen el consumo a la mitad
- Optar por bombillas de bajo consumo. A lo que se puede unir la tecnología como optar por bombillas inteligentes y programables, con sensores de movimiento. Ahorra y aumenta su vida útil.
- Apostar por el aislamiento para evitar pérdidas es punto clave de la casa, que constituyen el 30% del total del consumo del hogar.
- Prescindir del horno y apostar por otros electrodomésticos como el microondas (gasta alrededor de un 60% menos).
- Ajustar la temperatura de la calefacción o apagarla.
Desde la compañía eléctrica Lucera explican además cómo saber leer la factura de la luz para conocer si estamos pagamos de más por la factura y ahorrar en energía.
- Revisa la potencia pero ten cuidado. Durante el periodo de alarma los autónomos y empresas que hayan reducido su actividad pueden reducir la potencia contratada mientras dure el confinamiento. Sin embargo, para los hogares no es el mejor momento para reducir la potencia porque el incremento del consumo en casa puede hacer que salten las protecciones más a menudo por utilizar demasiados equipos al mismo tiempo.
- Cómo leer la factua de la luz y entender qué pagamos. Es normal que muchos usuarios no sepan entender la factura de la luz, debido a todos los conceptos que incluye y la complicada terminología propia del sector. Lo primero que se debe mirar es qué tarifa tienen: 2.0A donde pagan todo el día al mismo precio la energía o 2.0DHA en la que de 13 a 23 h. cuesta un 10-15% más, y el resto de horas un 50% menos.
- Al 90% de los hogares les conviene discriminación horaria (DHA) y ahorrarían entre 5-8 €/mes (entre 60 – 100 €/año) sin realizar ningún cambio de hábito. Al año podía ser un ahorro de un 10-15%.
- Analiza los precios que ofrece tu compañía. Para esto debemos analizar siempre el precio de la potencia y de la energía que nos ofrecen. Lo primero, debemos revisar a qué precio nos están cobrando la potencia contratada que se mide en €/kW. Debemos tener cuidado con cualquier precio que esté por encima del coste regulado (0,104229 €/kW·día, 3,170298 €/kW·mes o 38,043585 €/kW·año) ya que algunas añaden un margen comercial a estos costes.
“Debemos comprender que el precio de la energía puede ser fijo, durante un año normalmente, o variable (indexado) que varía según los precios del mercado mayorista y hacen que ahorremos a costa de una mayor variabilidad en el importe de cada factura. Un detalle: los precios del mercado actuales son los más baratos de los últimos 14 años. En lo que llevamos de abril de 2020 el precio es un 69,4% más bajo que abril del año pasado”
Emilio Bravo, CEO de Lucera
Fuente Idealista
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